Contrastes climáticos marcan la temporada seca en el Valle de Aburrá: junio lluvioso y julio con temperaturas históricas


La temporada de menos lluvias en el Valle de Aburrá, que abarca los meses de junio, julio y agosto, ha presentado marcados contrastes en su comportamiento climático. Mientras junio superó las expectativas de precipitación, con lluvias hasta 2.6 veces mayores a lo habitual —especialmente en municipios como Bello—, julio se destacó por registrar precipitaciones inferiores al 50% de lo esperado y temperaturas récord.

De acuerdo con el proyecto SIATA, las intensas lluvias de junio se debieron en gran medida a factores atmosféricos como las Ondas del Este, provenientes del continente africano, que favorecen la formación de nubes y precipitaciones en la región. En contraste, durante julio disminuyó la presencia de sistemas nubosos en el suroriente de Antioquia, lo que generó un ambiente más seco.

Además, julio registró temperaturas máximas históricas en cuatro fechas: los días 8, 15, 20 y 28, lo que evidencia el aumento de la radiación solar durante este mes.

Según Daniel Ruiz Carrasquilla, coordinador general del proyecto SIATA, para el mes de agosto se estima un 80% de probabilidad de que las temperaturas se mantengan por encima del promedio histórico, aunque no se descartan eventos intensos de lluvia. “Además de las Ondas del Este, las precipitaciones podrían generarse por condiciones como la alta insolación, que aumenta el vapor de agua y favorece lluvias en la noche o madrugada”, explicó.

Ante este panorama variable, el Área Metropolitana del Valle de Aburrá invita a la ciudadanía a consultar constantemente el estado del tiempo en el Geoportal Ciudadano (geoportal.siata.gov.co), con el fin de tomar decisiones informadas y reducir riesgos ante posibles eventos climáticos extremos.