El programa «Unidos por el Agua», una iniciativa que comenzó en el cuatrienio 2016-2019, se ha propuesto como objetivo que 50.000 hogares en Medellín accedan a agua potable y saneamiento básico durante los próximos cuatro años.
Este esfuerzo, liderado por el Distrito en colaboración con EPM, busca abastecer del recurso vital a familias que anteriormente dependían de redes artesanales, lo que significaba que el agua que llegaba a sus hogares no era apta para el consumo humano.
«Esto es un sueño hecho realidad. Conectar a una familia al agua potable es conectar a la vida», afirmó el alcalde Federico Gutiérrez Zuluaga durante una visita al barrio 8 de Marzo, en la comuna 9, uno de los sectores beneficiados por el proyecto. Además de llevar agua potable y alcantarillado, el programa incluye la mejora de viviendas y la titulación de propiedades, beneficiando a zonas que históricamente han sido de invasión.
El gerente general de EPM, John Maya Salazar, destacó que la inversión para el cuatrienio será de más de $350.000 millones, lo que permitirá llegar a los sectores más vulnerables de la ciudad. «Este proyecto no solo está en nuestra dirección estratégica, sino que forma parte de nuestra convicción de apoyar el desarrollo de los barrios», señaló.
Las intervenciones de 2024 se concentrarán en sectores como Altos de la Virgen, El Faro, San José la Cima, Tanque Santa Elena, La Cruz, Buenavista y Loma Hermosa. Además de garantizar el acceso a agua potable, estas acciones mitigarán riesgos ambientales y de salud, especialmente en zonas cercanas a la quebrada Santa Elena, donde las conexiones artesanales han sido comunes.
Este esfuerzo se enmarca en el Plan de Desarrollo «Medellín Te Quiere», que busca generar confianza, igualdad de oportunidades, equidad y desarrollo sostenible para todos los ciudadanos.