Corantioquia y Cornare culminan con éxito el POMCA del río Guadalupe y Medio Porce, avanzando en la planificación ambiental de Antioquia


Antioquia sigue fortaleciendo su liderazgo ambiental con la formulación del Plan de Ordenación y Manejo de la Cuenca Hidrográfica (POMCA) del río Guadalupe y Medio Porce, un esfuerzo conjunto entre Corantioquia y Cornare que ya se encuentra en su fase final de aprobación.

Este nuevo POMCA se suma a los 13 planes ya implementados por Corantioquia, consolidándola como una de las autoridades ambientales con mayor número de cuencas ordenadas en Colombia. Gracias a este avance, ya se han ordenado 1.435.000 hectáreas, lo que representa el 40% de la jurisdicción de la corporación, estimada en 3.600.000 hectáreas.

La cuenca del río Guadalupe y Medio Porce beneficia directamente a los municipios de Gómez Plata, Santa Rosa de Osos, Yolombó, Amalfi, Carolina del Príncipe, Santo Domingo y Guadalupe. El plan busca promover un desarrollo territorial ordenado, resiliente y sostenible, mejorando la calidad de vida de las comunidades asentadas en estas zonas.

En el contexto del cambio climático, los POMCA formulados por Corantioquia integran programas específicos para reducir la vulnerabilidad ante amenazas naturales, mediante el monitoreo constante, la generación de conocimiento sobre riesgos y la evaluación de medidas de adaptación climática.

La formulación de los tres últimos POMCA —río Bajo Nechí, río San Juan Ituango y río Guadalupe y Medio Porce— ha contado con una inversión superior a los 6 mil millones de pesos. En particular, la cuenca del río Nechí, que atraviesa el Bajo Cauca y el Nordeste antioqueño, presenta grandes retos ambientales debido a la minería ilegal. Ante esta situación, se han puesto en marcha estrategias de restauración ecológica, gestión sostenible del territorio y participación comunitaria.

Una de las iniciativas destacadas en esta zona es Guardaciénagas, que forma líderes comunitarios en Nechí, Cáceres, Tarazá y Caucasia para trabajar en la conservación de ciénagas, restauración de coberturas vegetales y fortalecimiento de la soberanía alimentaria en comunidades vulnerables.

Estas acciones se potencian mediante una gobernanza ambiental colaborativa, articulada con entidades territoriales, la red de Guardabosques, resguardos indígenas, consejos comunitarios afrocolombianos y juntas de acción comunal, promoviendo la legitimidad y eficacia de las intervenciones en el territorio.

Juan Fernando Gaviria, ingeniero ambiental de Corantioquia, resaltó:

“La participación de las comunidades ha sido fundamental en todo el proceso de formulación e implementación de los POMCA. Los Consejos de Cuenca se han consolidado como espacios de diálogo donde los actores del territorio construyen conjuntamente una visión de desarrollo sostenible basada en la protección del recurso hídrico y la adaptación al cambio climático”.

La implementación de los POMCA genera múltiples beneficios para Antioquia: uso sostenible de los recursos naturales, protección de ecosistemas estratégicos, reducción de riesgos ambientales, mejora en la calidad del agua y fomento de la participación comunitaria. Estos instrumentos se convierten en pilares fundamentales para la resiliencia climática, al integrar la restauración ecosistémica con el desarrollo económico y la sostenibilidad ambiental.